Querida
Amiga
No pedí esto. Nunca lo quise.
Aparentemente
soy una persona bastante social y ocupada. Desde el rayar el alba hasta que la
noche cae completamente, siempre me encuentro rodeada de personas a las que
aparentemente les encanto como persona y desean estar conmigo. Mi familia en
casa, mis compañeros en la escuela, mis amigos en mi tiempo libre y los fines
de semana, y mucha más gente en clubes y demás actividades extracurriculares.
No hay momento del día que esté sola y eso me molesta, lo odio, detesto a
todos. Con sus sonrisas falsas y descaradas. Su egoísmo es palpable y son
hipócritas hasta la médula. Pero nunca pedí su falsa atención.